Ana Ávila anima a los reparadores a ser más eficientes que nunca para enfrentar con éxito la creciente presión competitiva del mercado

CONEPA comparte su visión de los desafíos actuales del taller en la Asamblea General de APREVAR

La sostenibilidad económica del taller preocupa a los talleres de toda España. Las dificultades para conseguir rentabilidades mínimamente adecuadas son parecidas a lo largo y ancho del país como tuvo ocasión de comprobar Ana Ávila, directora corporativa de la Federación Española de Empresarios de Talleres de Automoción (CONEPA), durante su participación, el pasado día 11 de noviembre, en la Asamblea General de La Asociación provincial de Reparación y Venta de Automóviles y Recambios de Lugo (APREVAR).

 

La falta de personal, la creciente desigualdad en la relación con las aseguradoras, la digitalización del taller o la implantación del esquema SERMI, fueron los aspectos centrales que vertebraron la intervención de Ana Ávila, directora corporativa de CONEPA, en la Asamblea General de APREVAR. En opinión de la directiva, tales cuestiones son las que más están contribuyendo a incrementar en estos momentos la tradicional presión competitiva del mercado sobre los talleres: comprometen la obtención de una rentabilidad adecuada para enfrentar las inversiones de futuro necesarias y hasta, en muchos casos, la sostenibilidad económica misma de muchas micropymes de la reparación.

 

En su presentación ante los socios de APREVAR, Ávila analizó con todo detalle cada uno de los asuntos que ocupan y preocupan a los empresarios de la reparación, explicando las actividades realizadas por CONEPA en el ámbito nacional para minimizar el impacto de los mismos sobre el día a día del taller. Se detuvo especialmente, por ser el más reciente de los temas a los que deberán prestar atención los reparadores, en el esquema SERMI. Contó que será imprescindible acreditarse en el mismo para poder realizar intervenciones que requieran del acceso a información sobre mantenimiento y reparación relacionada con la seguridad el vehículo, pero también dijo que todos los talleres dispondrán de tiempo para hacerlo y que contarán con el respaldo de sus asociaciones.

 

“La presión competitiva a la que están sometidos los talleres es tremenda, y no solo por cuestiones de mercado, sino también por toda la normativa existente, y la que está por venir, que no solo complica el día a día de las empresas, en su mayoría micro y nano pymes, sino que además siempre representa un coste económico”, señala Ana Ávila. “En un contexto como el actual, de márgenes muy ajustados, a los talleres no les queda otra que ser más empresarios que nunca y mejorar la eficiencia de sus procesos para conseguir rentabilidades mínimamente adecuadas, que les permitan vivir hoy y pensar en las inversiones necesarias para garantizarse un mañana. Desde CONEPA trabajamos activamente por contribuir a generar las condiciones que garanticen esa rentabilidad y remover los obstáculos que las dificultan”, concluye.